Se suicida exfuncionario duranguense exhibido en redes sociales
Salvador Hernández Hernández, exsecretario del ayuntamiento de Mapimí, fue encontrado muerto este mediodía en su domicilio de dicha demarcación.
Apenas en agosto pasado Salvador Hernández había sido removido de su cargo luego de que usuarios de redes sociales exhibieran una fotografía suya mostrando los genitales.
Según la información expuesta por la Vicefiscalía estatal, el exservidor público fue localizado por sus propios familiares en la cochera de su domicilio, ubicada en la zona centro de Mapimí. El dictamen forense confirmó que el deceso se debió a asfixia por ahorcamiento.
El 14 de agosto un usuario de Facebook, identificado como Roberto Gómez Hunjo (cuya cuenta fue dada de baja), utilizó su perfil para colocar una fotografía de Hernández Hernández, a la que acompañó con el comentario “A cabrón me encontré con esta asquerocidad de foto (sic). ¿Qué le pasó a este funcionario de municipio. Y conocido pueblo mágico de Mapimí?”
En ella se mostraba al entonces funcionario, de lentes, con su teléfono celular en una mano y con la otra sosteniendo su ropa interior para exponer sus genitales.
En aquella fecha, y ante el escándalo, el servidor público intentó excusarse: “Amigos…! Quiero compartir por este medio que mi Facebook fue jakeado y si les etiquetan mensajes o fotografías les comento que no son de mi face… hago esta aclaración por lo que han estado subiendo y comentando algunas páginas anónimas..! Espero y me comprendan y me deslindo de cualquier mensaje o fotografía que les llegue o les etiqueten” (sic).
En una publicación posterior aseguró que la imagen correspondía a un fotomontaje usado para difamarlo y perjudicarlo.
Pero de acuerdo con los testimonios relatados en las páginas en que fue compartida la imagen, habría sido el propio funcionario quien envió la fotografía a otro usuario, que luego decidió exhibirlo.
No obstante, después la alcaldesa priista de Mapimí, Martha Castro, dio por real la fotografía al confirmar el despido de su colaborador.
Fuente: Proceso