MARCHANDO POR AYOTZINAPA, UNA SUTÍL CRÓNICA
El 31 de octubre de 2014 nos reunimos – los de la libertad- en un contingente de aproximadamente doscientos alumnos para caminar hacia el punto de reunión (a cualquiera le emociona una cita, una reunión para ser lo que hasta unos minutos no eras). En la avenida que conduce a la Universidad Politécnica de Zacatelco Tlaxcala ya nos esperaban un grupo de normalistas de la comunidad de Panotla, puntuales y listas para una marcha justa y digna, lo digno de marchar junto a un normalista es marchar por y con junto a un camarada (como lo dijo Che Guevara). Ensayamos consignas, afinamos la voz, nos reímos, nos formamos…
Las 8: 00 am., hora laboral: caminar hacia el primer carril de la carretera Puebla – Tlaxcala en dirección de la comunidad de Zacatelco (con las respectivas piedras y ladrillos para cerrar la circulación vehicular y direccionarla por la única vía alterna), una vez que ocasionamos las primeras molestias a los conductores llegaron las primeras consignas: ¡hombro con hombro, codo con codo, hombro con hombro, codo con codo… Ayotzinapa somos todos!, Zaapaaaata vive, la luuucha sigue, zaapaaaata vive, la luuucha sigue, ¡estudiantes unidos, jamás serán vencidos! ¡Estudiantes unidos, jamás serán vencidos!: ¡justicia! ¡Justicia! ¡Justicia! ¡JUSTICIA! ¡Justicia! ¡JUSTICIAAA! ¡Justicia!, ¡NOO SOMOS TODOS, FALTAN 43! ¡Noo somos todos, faltan 43! ¡No somos todos, faltan 43! ¡No somos todos, faltan 43!, ¡uuno, doos, trees, cuatro, cinco, seis, siete, oocho, nueeve, diez, oonce, dooce, trece, catorce, quince, diezseis, diezysiete, diezsiecho, diezsineve, veinte, veintiunoo, veintidoos, veintitrees, veinticuatro, veinticiinco, veintiseeis, veintisetee, veintiochoo, veintinueve, treinta, treintayuno, treintaydoos, treintaitrees, treintaycuaatro, trreintaycincoo, treintaiseeis, treintaysietee, treintayochoo, treintaynueeve, cuarenta, cuarentaiuno, cuarentaydoos, cuarentaytrees ¡JUSTICIA! ¡Justicia! ¡JUSTICIA! ¡Justicia!, ¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!, ¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!, ¿Cuántos SON? ¡43! ¿Cuántos SON? ¡43! ¿Cuántos SON? ¡43! ¿Qué queremos? ¡Justicia! ¿Qué queremos? ¡Justicia! ¡JUSTICIA! ¡VIVOS SE LOS LLEVARON, VIVOS LOS QUEREMOS!, ¡VIVOS SE LOS LLEVARON, VIVOS LOS QUEREMOS!, ¡VIVOS SE LOS LLEVARON, VIVOS LOS QUEREMOS! ¿Por qué se los llevaron? ¡No séé no séé! ¿Por qué se los llevaron? ¡No séé no séé! ¿Por qué se los llevaron? ¡No séé no séé!, ¡JUSTICIAAA! ¡Justicia!, ¡NOO SOMOS TODOS, FALTAN 43! ¡Panotla Tlaxcala, en pieee de lucha! ¡Ayotzinapa Gerrero, en pieee de lucha!
En la plaza municipal de Zacatelco, Oratoria y discursos: Solidarizarnos con los cientos de personas que hoy demandan en las calles de nuestro país la aparición de 43 alumnos de Ayotzinapa del Estado de Guerrero, vivos se los llevaron y vivos los queremos! Al público en general y a quien corresponda: nuestro país vive una tragedia nacional en materia de seguridad, el estado de derecho se cuestiona y la justicia se ha deteriorado lamentablemente. Es terrible que nuestra democracia no pueda superar obstáculos tan terribles como la impunidad y la corrupción: pero más terrible es ver cómo las instituciones encargadas de superar tales obstáculos no están dando resultados, su ineficacia se eleva al grado de ineptitud. La acción efectiva del Estado para nuestros compañeros de Ayotzinapa no ha llegado, pero luchemos por que cada madre de familia que hoy llora por un hijo, lucharemos porque los responsables sean juzgados y tengan que pagar con todo el peso de la ley. Deben ser sancionadas la serie de complicidades políticas en este asunto, mas allá de los colores y partidos debe establecerse un proceso legal que nos permita lograr una paz con justicia y dignidad. El filósofo Ortega y Gasset decía: <<yo soy yo y mi circunstancia, y si no la salvo a ella no me salvo yo>> con esto quería decir que nosotros somos nuestra realidad circundante, lo que le pasa a ella nos pasa a nosotros porque mientras exista la impunidad y la injusticia nadie podrá sentirse tranquilo ni feliz, porque mientras haya un elemento criminal la amenaza es común, mientras exista un alma encadenada… no seremos libres.
Al final de los discursos y las consignas se entregaron algunos víveres a las compañeras normalistas ya que por ahora ellas subsisten por sus propios recursos, los recursos del Estado han sido suspendidos. No puedo felicitar a las autoridades municipales por la seguridad de la marcha puesto que ese es su trabajo, esa es su obligación: preservar la vida de los ciudadanos que ejerciendo su derecho constitucional salen a manifestar: Ayotzinapa somos todos, ¡vivos se los llevaron, vivos los queremos!
PD. Las farsas y las declaraciones de la PGR no satisfacen ni mitigan el dolor de una sociedad que no cesará de exigir justicia y hacer pagar a los responsables intelectuales de este genocidio. La ley humana caerá sobre ellos, sépanlo: no descansaremos hasta que todo el peso de la ley caiga sobre los responsables. Salud!