Llego el 2016, los Reyes Magos y ¿la asertividad?
Bonito día tenga amable lector, cuando usted lea esta sección yo ya habré desempacado y disfrutado ampliamente de todos los juguetes y regalos que los reyes magos me han traído esta ocasión y por supuesto deseo que usted también esté satisfecho y divertido al encontrar bajo su árbol navideño o cerca de sus zapatitos aquella pelota colorida, el balero de madera, el trenecito de pilas con vías y sonido inconfundible que indica y promete viajes sin fin.
Las festividades y reuniones a veces hasta obligadas (por las circunstancias, la tradición o la falta de entusiasmo individual), han quedado atrás en los recuerdos, si han sido adecuadas felicidades, si no lo fueron lo invito a usted a revisar (no a analizar), que sucedió para que no lo fueran y hacer lo necesario para que las próximas, que sé pueden ser muchas sean completamente de felicidad.
Es momento de darle seguimiento a todas esas muestras de afecto, palabras, acciones y propósitos que con tanto entusiasmo se expresaron en este periodo de fin de año, solo le comentó lo que usted ya sabe seguramente:
Si deseó bajar de peso es muy probable que la dieta de comer como conejo no es muy funcional porque solo de hierbitas no podemos adquirir todos los nutrientes que nuestro organismo requiere ok, entonces a comer de todo pero sin exceso y ese exceso recuerde que muchas veces proviene de la ansiedad que no hemos atendido adecuadamente ¡aja!.
Si pidió para usted y para sus seres queridos, amor dinero y felicidad muy bien muestra que tiene la capacidad de otorgar buenos sentimientos, deseos y tal vez hasta humildad o bien que usted como muchos más ha aprendido a repetir como perico lo que la tradición sugiere, que le nace continuar fomentando aquella competencia de discursos que solo motivan el sentimentalismo vago y lleno de falsedad en donde las familias solían reunirse y hablar “con lo más profundo de su corazón”, impresionando a quien se dejará con palabras sofisticadas, generando sentimientos de culpa y que en la realidad pasaban años o inclusive la vida y no se les veía practicar dichos discursos tan solemnes; le invito a dar menos discursos (o evitarlos) y concretarnos a la aplicación de hechos palpables.
El 2016 ha llegado, bravo, viva, hurra!! Aja ¿y? , no se trata de acumular años, lo asertivo es incrementar momentos de satisfacciones y desarrollo humano.
¡El 2016 ha llegado sí! …Pues a vivirlo intensamente y recuerde que los años en realidad no traen nada, son el regalo de la vida (Dios) que nos permite irlo decorando con nuestros actos, acciones y logros.
Dios nos bendice cada dia, hagamos nuestra parte: ¡vivir y dar vida a nuestro entorno!
Soy Anastasio Díaz Meléndez y como siempre es un placer saber que usted está aquí.
(Citas para asesoría psicológica al 246 122 43 18).