El baúl de los Recuerdos se abre para analizar el papel de la iglesia durante el movimiento de Independencia -en estos tiempos de cambios y transformaciones- destacando que sólo el hombre es consciente de su historia, si la ignora perdería al mismo tiempo la conciencia de sí mismo y de su entorno. Conocer nuestra historia nos ayuda a evitar los mismos errores, a vivir mejor el presente y a planear el futuro pues en la historia de la humanidad se entrelazan la voluntad divina y la del hombre. Pero también la historia nos permite sentirnos orgullosos de nuestro pasado, de nuestros orígenes y especialmente de nuestra gente, de todas aquellas personas que fueron nuestros familiares, amigos, conocidos y que finalmente hoy sólo son un hermoso recuerdo. Al final todos somos México.

Cuando Hidalgo, Morelos y otros personajes promovieron la independencia de México fue el momento en que España era dominada por Francia. Hidalgo vio en la batalla el medio para defender la fe, la ley y las buenas costumbres. Pero las masas no piensan y enardecidas comenten atrocidades, ese fue el caso de la gente que seguía a Hidalgo, quien tomaba presos a quienes no apoyaran la independencia, entre ellos varios religiosos, esa fue la razón por la que el Obispo de Michoacán Abad y Queipo lo ex comulga pero como todo el que conviviera con un excomulgado quedaba igual y para no hacer daño a terceros se le levantó la excomunión; tiempo después al volver a Valladolid su ejército mata a todos los peninsulares del lugar entre ellos a varios sacerdotes lo que motivó nuevamente su excomunión, después de romper relaciones con Allende, Hidalgo es enviado a Chihuahua y condenado a morir fusilado, pero antes de que esto sucediera escribe un documento donde pide perdón y se confiesa, lo que le levanta la excomunión por su arrepentimiento sincero. 

Por otro lado la causa de excomunión de Morelos fue por nombrar vicarios generales castrenses, es decir sacerdotes que atendieran las necesidades espirituales del ejercito que buscaba la libertad y la justicia, alguien debía confesarlos, casarlos, bautizar a sus hijos, darles los auxilios necesarios, esa era la función de los vicarios generales castrenses, por hacerlo él y no el Obispo fue excomulgado, pero fue un caso similar al de Hidalgo, se le levantó la excomunión, se arrepintió, hizo una confesión general y después fue ejecutado. 

La Diócesis de Tlaxcala-Puebla en el proceso de independencia hizo que la Iglesia volviera al terreno político y el orden público. El Obispo de Puebla llamó a todos sus sacerdotes el 27 de octubre de 1810 en la catedral de Puebla y les pidió que le informaran sobre cualquier insurrección, a fin de potenciar y ayudar al gobierno legítimo. De modo que desobedecer al rey de España era alterar el orden público. De esta forma los sacerdotes de la Diócesis debían promover la monarquía pero con ello estaban en un dilema, pues los insurgentes que eran católicos le pedían los sacramentos y atención espiritual, si la negaban perdían el alma de una persona sedienta de libertad. Podían caer en irregularidad los sacerdotes por cumplir su ministerio y si dejaban la parroquia era falta de fe y de amor a la patria. La Diócesis de Tlaxcala-Puebla trató de llevar hasta donde más se pudo una vida normal, siguió administrando los sacramentos, celebrando las misas, confesando y atendiendo a sus fieles en medio de la lucha por la independencia. 

El clero de la Diócesis de Tlaxcala-Puebla vio en la razón y la cultura el medio para lograr la independencia del país y no la guerra. México tenía escuelas al nivel de Europa como el Colegio de Minería pues veía en las artes y la ciencia un medio para lograr la felicidad humana. No todo fue barbarie ni desorden en esos siglos, muchos hombres entre ellos varios sacerdotes promovieron la cultura como Juan Joshep Eguira y Eugen quien creó la biblioteca mexicana. Entre otros sacerdotes que promovieron la cultura se encuentran El Padre Coss (abogado), Guridi y Alcocer (de Ixtacuixtla), el Padre Quino (cartógrafo), el Padre Mariano Matamoros, el Obispo Campillo (promovió la vacuna contra la viruela) el Obispo Juan de Lardizábal (cartógrafo)… En las parroquias se enseñaba a leer y escribir con el catecismo, es decir, la gente que leía en ese tiempo se lo debía a la iglesia y no al estado. 

Agustín de Iturbide logró consumar la independencia después de varios años de lucha con su propuesta de las 3 garantías: Religión, Unión e Independencia. Veía en la religión el mejor punto de unión para la nación, muchos afirman que la verdadera conquista la hizo la Virgen de Guadalupe que hizo desaparecer las diferencias entre los pueblos y la armonía de 2 culturas. Pues una nación nace cuando sus habitantes tienen un rumbo común y México nació cuando hubo el perdón entre 2 pueblos. Después de la consumación de independencia la nación unida por la misma fe y el anhelo de libertad ha tomado otros rumbos que no han logrado la unidad del todo, pues la pequeña porción que nos gobierna actualmente no ha encontrado fuera de la fe algún punto de unión nacional.

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