Este año sí
Si, ¿qué? Cumpliré los propósitos que no cumplí el año pasado (no puedo evitar una leve sonrisa de ironía para creer que la proposición “cumpliré” sea verdadera, dudo más que por oficio, por salud mental…) pero, ¿Qué es cumplir, a quién le importa? O más bien quiero pensar (razonar cuesta): ¿por qué no cumplí con mis propósitos el año pasado?, ¿fue mi trabajo, la familia, mi falta de voluntad, fue la televisión?, ¿fue la rutina y el tedio quienes vencieron la imponente fuerza de voluntad de inicio de año?, ¿el fracaso de los demás me arrastró a sumarme a ellos?, ¿las decisiones de mis superiores determinaron mi fracaso?, ¿y si todo es culpa de mis colaboradores mediocres?, ¿mis vicios pudieron más que mis virtudes? Hay días que pienso que el gobierno tiene la culpa, pero luego pienso que el gobierno somos todos y que yo soy parte esas mayoría que estableció que el gobierno actual esté ahí. Otros días pienso que cuando me lo propongo lo cumplo, sólo hace falta que me decida… pero cómo empezar. Después digo: soy inteligente, ¿cuál es el problema?, pero si fuera inteligente debería cumplir con mis propósitos ¿o ser inteligente no tiene que ver con cumplir metas? Pero ahora, ahora quiero ser optimista, es más soy optimista y éste año diré ¡Sí!
Este año si ahorraré y tendré más dinero para lo que quiero. ¿Qué es lo que más quiero? No importa si no está claro: ahorraré aunque el dólar suba, no obstante el salario mínimo sólo incremente unos centavos, ahorraré aun cuando en nuestro país la canasta básica sea casi un lujo, – creo que los gastos de las continuas fiestas con mis amigos no afectarán (total la amistad es primero)- . Ahorraré explotando más a mis trabajadores – una mochada por aquí y otra por allá -; venderé más caro y que el consumidor cargue con mis deudas; le quitaré presupuesto a unos y le aumentaré levemente a otros; ya en un plan de negocios igual y saco algo con la visita del Papa a México. Ahorraré y por fin pagaré unos diplomados y congresos que tanta falta me hacen, igual y por fin pago mi titulación – los títulos siempre han tenido un precio pero no importa todo tiene un precio -. Se me olvidaba que tengo que ahorrar para pagar mi candidatura en el PRD para empezar mi carrera política, en fin la vida es así luego se me recompensará.
Este año sí cuidaré mi salud. Realizaré un proyecto de ingesta de alimentos que se adapte a mi jornada laboral; estableceré un régimen alimentario “variado, equilibrado y suficiente”; complementaré mi alimentación con ejercicio (¿diario?, ¿me alcanzará mi ahorro para el Gym?), comeré menos del arroz y las tortillas diarias (una amiga me hará sugerencias nutricionales…). Definitivamente menos tacos, tortas, cemitas, refrescos, cervezas, molotes, tortas con tamal, pozole, carnitas, churros, postres… Definitivamente éste año: sí dinero, sí salud y sí…
Este año si encontraré el amor. Me refiero a encontrar el amor de mi vida, a mi alma gemela, mi alter ego. Este año superare mi egolatría y aceptaré que puedo aprehender de otro, me respetaré y por dignidad sólo aceptaré ser tratado como persona y no como objeto o animal. Seguiré mi política de ser fiel y leal en todo momento. Me entregaré a una relación como nunca, no dudaré del amor, y atesoraré cada gesto pues comprenderé que la vida es amor en la realización de nuestro ser con el otro. Este año me caso, tendré problemas, las deudas y las responsabilidades fiscales en pareja saben a melón y las responsabilidades domésticas son todos los días diversión…
Este año sí, todo será mejor, todo cambiará de forma positiva. Siento ese optimismo clásico de cuando algo comenzará y la emoción me absorbe, quiero cumplir todo ya, quiero iniciar ya, porque nada es imposible. Este año SÍ SEÑOR.
PD. Pensar, prometerse a uno mismo, ilusionarse o auto engañarse no cuesta nada. Que nuestra voluntad sea dueña y señora. Salud!